Ruta en moto por Asturias. Subida al Alto del Gamoniteiro. Las vistas más espectaculares de Asturias

En estos años he pasado por muchos puertos de montaña, unos con la cámara y otros muchos sin ella, y en ninguno me he encontrado con estas vistas tan impresionantes, con ese mar de nubes debajo de tus pies. Eso si, también he pasado por pocas carreteras tan complicadas. Sin duda merece la pena.

Salimos desde Caranga de Abajo hacia la AS-229, que cruza de punta a punta el Parque Natural de Ubiñas hasta Pola de Lena. Antes de comenzar con la subida del Alto del Gamoniteiro pasamos por el Alto de la Cobertoria, que no cuenta con demasiada pendiente ya que Caranga de Arriba ya está bastante elevada. La carretera es una maravilla, buen asfalto, un trazado fluido y unas vistas impresionantes de los valles del parque natural. Conforme asciendes lo normal es que te encuentre con niebla hasta bien entrada la mañana. En el Gamoniteiro la vas a encontrar seguro, así que vete preparado para pasar algo de fresquete incluso en pleno agosto. En toda la subida vas a encontrar animales sueltos. Caballos, vacas y cabras, así que mucho ojo con las curvas con poca visibilidad. Encontrarás más cuanto más subas y en la mayoría de los casos tendrás que esquivar las vacas, que les da igual que lleves los escapes libres o que tu bocina sea la de un barco. En el Alto de la Cobertoria tienes un mirador espectacular con unos bancos y unas mesas. Si llegas con hora te recomiendo tomarse un café de termo y algo de embutido cortado a navaja allí para desayunar antes comenzar a subir el Alto del Gamoniteiro. Te montas en la moto con las pilas cargadas. Conforme sales del mirador tienes un desvío, a ese ni caso, es el segundo cruce que te encuentras a la izquierda. Ojo con la velocidad que también es fácil pasárselo. Está a unos dos km del mirador. Los primeros metros de la subida al Gamoniteiro los haces entre vegetación espesa, por una carretera de buen asfalto aunque muy estrecha. De nuevo, ojo con los animales sueltos. En dos km pasas un paso canadiense y comienza el espectáculo. Desde aquí el asfalto está mucho más roto y los cortados que tienes a los lados tienen una caída de la que casi con toda seguridad no saldrías vivo. En cada curva cambia el paisaje y aumenta la pendiente. Las curvas no están señalizadas, el asfalto está bastante mal y por el ancho de la carretera solo entra un coche, así que toca subir con tranquilidad, más teniendo en cuenta que lo normal es que hasta os últimos cuatro km tengas una niebla bastante espesa. A mitad de la subida tienes un tramo de unos 70 metros de asfalto totalmente roto. La moto parece que se va a desmontar pero se pasa sin dificultad, hasta que dejas las nubes atrás y llegas a las antenas, desde donde tienes una de las vistas más impresionantes de todo Asturias.